Del «viejo verde» al «Sugar Daddy»

La popularidad de los suggar se ha convertido en un fenómeno social que invita a la reflexión de cómo se presenta este personaje en la sociedad venezolana.

El origen de la expresión “viejo verde” no está tan clara, pero hay citas del poeta griego Virgilio donde se refiere a Caronte como: “barquero muy desaseado, está muy poblado de canas en la barba y sin afeitar, resplandeciendo sus ojos como llamas (…) y pasa en la barca mohosa, ya viejo, las almas; pero la vejez de este dios es briosa y verde”. Y era considerado muy atractivo a pesar de su edad.

Ahora bien, tomando en cuenta que verde es lo contrario a maduro, y que así es como se denomina a personas (hombres) de edad avanzada que manifiestan un deseo sexual hacia personas mucho más jóvenes; esta frase ha recorrido el mundo y se ha instalado en el imaginario colectivo para referirse a relaciones que podrían ser inadecuadas por la diferencia etaria, pero ¿hasta dónde? Y ¿para quiénes es inadecuado? 

La figura del hombre mayor tiene un papel bastante importante en la sociedad, porque es el que tiene “estabilidad, es sabio, es inteligente, tiene experiencia y dinero para suplir las necesidades de su (s) pareja (s)”. Además, para las mujeres, estar con un hombre mayor significa que va a estar “protegida y que no le va a faltar nada”.

Ejemplo de esto, son los matrimonios infantiles (que siguen existiendo) donde la familia entrega a la niña a un hombre que le dobla o le triplica la edad para que ella sea la responsable de traer al mundo a sus hijxs y de cuidar el hogar, porque este hombre le va a proveer de todo.

¿Es mejor enamorarse de un hombre mayor?

De forma directa o indirecta, las mujeres crecemos con la idea de que un hombre mayor siempre es mejor que uno de igual edad o menor que nosotras. Por lo que, hay canciones, videos, películas y artículos de internet donde nos explican las maravillosas razones de enamorarnos de alguien que puede tener la edad de nuestros padres o abuelos. Y una de las características que más se resalta es que después que pasas los 20 años no importa la edad de tu enamorado, siempre y cuando cumpla con los estándares de un hombre mayor. Dinero y estabilidad. Hay artículos de revistas famosas que explican hasta cómo enamorar a un hombre mucho mayor, porque según son todas ventajas.

Aclaramos que no hay nada en contra de la diferencia de edad en el amor, siempre y cuando todo esté conversado y consensuado de forma consciente y responsable.

Hay otra situación que llama la atención, y es la relación que se da por ejemplo entre alumna y profesor, empleada y jefe, asistente y director y un largo etc. de combinaciones posibles cuando un hombre mayor y con poder adquisitivo y autoridad es el centro de atracción para mujeres adolescentes y jóvenes ¿es esto casual?, ¿es amor? O ¿es parte de la socialización que tenemos en torno a la idílica relación con un hombre mucho mayor que nosotras?

 

La cultura y su participación en la construcción del amor “40 y 20”

Canciones como Mayores de Becky G nos hacen bailar y mover el cuerpo, pero la letra de esa canción nos explica claramente que una jovencita lo que desea es un caballero, que le abra la puerta, que le mande flores, “que sea interesante, que sea un buen amigo, pero más un buen amante ¿Qué importa unos años de más?”, porque también es bien sabido que los hombres mayores tienen más experiencia en la cama y por ende, será mayor el placer que proporcionan. 

Y antes del reguetón, tenemos la popular “40 y 20” de José José quien asume: “ Yo soy otoño en tu vida, y tú eres dulce primavera”, pero igual al final del coro plantea que: “Es el amor lo que importa, y no lo que diga la gente”. Y todo esto es cierto cuando se habla de amor, pero una relación con más de 10 años de diferencia puede ser perjudicial para la parte más joven, inocente, ingenua y sin experiencia, porque así es que muchas veces desean que sea la dama que los acompaña.

Eddy Herrera al contrario de José José, le dice que es demasiado niña para empezar a amar, porque solo tiene 13 años. ¿Pero qué hacía un hombre conversando de amor con una adolescente?

Por su parte, Roberto Lugo lanzó una canción en 1989 que todavía se escucha, se baila y se canta a todo pulmón titulada Por ser tan niña donde explícitamente habla de una relación con una menor de 17 años que dice lo siguiente: “…por ser tan niña, sus padres se enteraron y todo acabo. Buscaron en mi edad la falsa información, pues para mí la edad está en el corazón. Por ser tan niña, fue mía y aunque ahora ya no puede ser yo le enseñé el amor. La convertí en mujer”. Afortunadamente, hubo una familia responsable en este caso. 

Nos sobran ejemplos en la música, el cine y la tv de la validación social y cultural de un hombre maduro llevando del brazo a una joven mujer. Escena que no se juzga o se crítica, porque un hombre mayor siempre nos va a enseñar y a proteger, además de proveer. 

Por eso, no está mal que ahora la meta de mujeres adolescentes y jóvenes sea conseguir un hombre mayor que las “sostenga, sustente, patrocine o apoye económicamente”. Vale destacar que estas son algunas de las palabras que se usan cuando hay que referirse a la relación que se tiene con el Sugar Daddy.

Esta denominación de sugar daddy empezó a usarla al inicio del Siglo XX la modelo Alma de Bretteville al mantener una relación amorosa con el empresario azucarero Adolph B. Spreckels, que era 24 años mayor que ella, pero se popularizó nuevamente a partir de la segunda década del 2000 para referirse a los hombres millonarios o no, pero con dinero y unos años más que su Sugar Baby. 

Aplicaciones, páginas y redes sociales para conseguir un sugar daddy

Está muy bien ofrecer sostén económico a alguien que lo necesita, pero ¿ese apoyo a mujeres jóvenes es gratis o debe haber algún tipo de reciprocidad? ¿Se tiene que dar algo a cambio de este dinero? Según un reportaje publicado en el diario El País de España, en octubre de 2022, hay una idea generalizada en las jóvenes de que no hay que mantener relaciones sexuales o hacer cosas que no deseen con los sugar y ellos igual depositan dinero; sin embargo, las jóvenes universitarias entrevistadas cuentan que tuvieron que hacerlo, además de cambiar su forma de vestir, hablar, acompañarlo a restaurantes y hasta conocer a sus amigos. Todo para recibir una cantidad específica de dinero semanal. ¿Es así en todos los casos? Podemos entender que no, pero que siempre existirá la posibilidad de entregar algo a cambio del beneficio económico más allá de la compañía.

Actualmente, hay una cantidad considerable de aplicaciones para conseguir un sugar con las características que desees. Ingresas tus datos como en una cualquier app de citas y comienzas a navegar en la búsqueda del proveedor ideal. Una de las  app más conocida es Sugardating con 12 años en el mercado, y que según el portal web Forbes, con datos proporcionados por la propia empresa “En España (…) tiene 150.000 usuarios, de los cuales un 28 % son Sugar Daddy, con un promedio de edad de 44 años y un 72 % son Sugar Baby, con un promedio de edad de 23 años”. Esta compañía es alemana, según El País de España tienen más de 40 millones de usuarixs alrededor del mundo, aunque hay países, como Venezuela que la página web no está disponible, sino que está activo el portal DateMyAge que es también para conocer hombres mayores alrededor del mundo. Éstas son sólo dos ejemplos de las páginas que ofrecen conocer al “sugar de tu vida”. Las páginas y aplicaciones no son gratuitas. Por ejemplo, en DateMyAge puedes registrarte libremente, pero para poder conversar con algún proveedor popular (casi todos son populares) hay que pagar una cuota que va desde los $20 hasta los $300 mensuales.

De esta manera nos venimos a Latinoamérica donde, según el portal web El Economista de México, en un artículo publicado en noviembre de 2022, este es el país con más sugar activos en la región, seguido de Argentina y Chile; por otra parte Perú, Colombia y Chile son los países con más sugar baby. Es importante decir que en todos los continentes la edad promedio es de 23 años las mujeres y 44 años los hombres.  

Así mismo, las empresas de comunicaciones publican artículos en páginas web que  explican cómo conseguir un sugar daddy, a dónde acudir, cómo comportarse, qué le atrae a un sugar daddy, las mejores aplicaciones para encontrar rápido un sugar daddy y más. Ninguna de estas publicaciones cuestiona o problematiza el hecho de que una mujer joven desee conseguir a un hombre mayor que la beneficie económicamente, de hecho se promueve.

Venezuela y el fenómeno de sugar daddy

Personajes como la “Bendecida” de Marko Music, una parodia que podría no serlo tanto, de una mujer que busca un sugar daddy que compara a su novio pobre con el señor adinerado, que habla de carros, carteras lujosas, que no le explica a su madre de dónde sale el dinero, y que asegura que no hay que “darla” gratis; puede ser comedia para personas adultas con información, pero para adolescentes puede convertirse en un referente. En Venezuela también tenemos a Tusi tan Rosa, siendo tusi el nombre de la cocaína rosada que contiene varias sustancias químicas, y que se usó en esta popular cuenta de Instagram (que ya no existe) entre 2019 y 2021 para referirse a las mujeres “Bendecidas”. Las publicaciones de ésta giraban en torno a cómo conseguir un sugar daddy, cómo sacarle dinero para operaciones, hacían publicidad de cirujanos plásticos y se burlaban de mujeres que aspiraban tener un sugar daddy y no estaban a la altura. Viralizaron términos en su llamado Tusi diccionario: como sugar daddy, que ya conocemos; splenda que es hombre que aparenta, pero no tiene dinero; y garrapata que es el hombre que se acerca a una mujer y le quita dinero. Esta cuenta sigue en Twitter y en Tiktok y nos preguntamos si ¿es parodia o una forma de promover estos estereotipos?

 

En Venezuela hay páginas que funcionan dentro del territorio nacional para conseguir sugar daddy, una de ellas es SugarDaddySeek. Un portal web bastante completo que tiene dentro de su diseño una sección para aclarar conceptos, un glosario, un blog con artículos relacionados al amor entre personas de “40 y 20” y por supuesto, cómo conseguir una cita con un sugar daddy.  Pero el artículo dentro del blog que más nos llamó la atención es el titulado: Característica de sugar daddy en Venezuela donde colocan la siguiente información: “el 96,3% de los hogares venezolanos son pobres y que el 80% de estos hogares se encuentran en situación de extrema pobreza. Esto significa que sólo el 3,7% son ricos.” Y continúan en el siguiente párrafo afirmando que: “(…) hay muy pocos sugar daddy en Venezuela, lo que lleva a una situación muy competitiva entre las sugar baby, y estos sugar daddy son más exigentes.” Y siguen con una lista de lugares, situados al este de Caracas, a los que debe asistir una aspirante a sugar baby. 

 

 

Este portal, según la página web Noticias Barquisimeto en un artículo publicado en noviembre de 2022, SugardaddySeek tiene más de “5.532.006 usuarixs para elegir e interactuar.”

De igual modo, está la página web SugarDaddyVenezuela.com ésta con menos contenido, pero clara en su propósito de acercar damas que necesitan afecto económico y caballeros con la voluntad de brindárselo. La portada de este sitio web tiene el siguiente texto:

Venezuela es un país de mujeres realmente bellísimas, las hay de todas las edades y de todos los tipos pero una mujer latina venezolana es la joya más valiosa de nuestra nación y por eso ahora puedes encontrar verdaderos tesoros rebosantes de vida en nuestro nuevo sitio de Sugar Daddy Venezuela. Entra acá y empieza a mirar a ver quién está y verás como quedas cautivado por la foto de una chica que te hará pensar en lo maravilloso que es ser hombre. Encuentra tu protegida, tu amiguita, tu capricho hecho mujer en este sitio recién llegado a Venezuela. Ella es ideal, es como el mercurio, rebosante de movimiento y curvas. Busca eso, un hombre maduro, para ella lo ideal es un hombre con las ideas claras pero con un gran corazón, joven por dentro y maduro por fuera.

Mujeres hermosas, tesoros rebosantes, hombres maduros de ideas claras y con gran corazón es lo que ofrece este portal para unir almas o cuentas bancarias.

En ambas páginas hay que registrarse y colocar datos básicos para acceder al catálogo de sugar. Sí, hay un catálogo. Es como una especie de Mercado Libre que ofrece personas con descripciones bastante sutiles para las mujeres que parecen damiselas en apuros, y con un tono más fuerte para los hombres que están desesperados por sacar de aprietos a una princesa joven.

También hay cuentas en Twitter donde se pueden ofrecer jóvenes como sugar baby. La cuenta @Sugarbabyvzla ofrece contacto con mujeres venezolanas reales, cuan Celestina, y aclara en su biografía que no son damas de compañía y que son chicas de su casa las que pueden conseguir. Esta cuenta tiene más de 9 mil seguidores y está abierta las 24 horas del día. 

¿Amor, moda o necesidad camuflada?

Hablemos ahora más específicamente de la situación de muchas adolescentes y mujeres en Venezuela, con la crisis sistemática que hemos vivido en el país y en niveles inimaginados cada habitante ha buscado la forma de sobrevivir y sobreponerse a las duras condiciones a las que estamos sometidxs. La casi inexistencia de servicios básicos, la nula posibilidad de ahorro y la poca esperanza de superación nos coloca en una situación de vulnerabilidad a muchas mujeres sin importar la edad. De acuerdo con la encuesta Encovi (2022), el 63 % de mujeres adolescentes y jóvenes entre los 12 y los 17 años no continúa sus estudios por: la necesidad de comenzar a trabajar para colaborar en sus hogares, la falta de conectividad, dedicarse a los cuidados del hogar o la poca pertinencia en la oferta educativa.

Entonces con pocas expectativas de realización de las mujeres, podemos pensar que la posibilidad de tener un sugar es bastante atractiva y tentadora para muchas venezolanas, cuando en redes sociales conseguimos tanto contenido relacionado con lo bueno que es tener un benefactor que lo único que nos pide es compañía y sexo en algunos casos. Justificando esto último con: “ya lo he hecho gratis, ¿por qué no hacerlo por dinero? Es lo mismo”, siendo esta la mejor forma de superación en la vida.

La idea implantada en nuestra sociedad de que “Venezuela es el país de las mujeres más bellas del mundo”, ¿nos coloca en una situación de ventaja para conseguir sugar? El escándalo de 2018 sobre la relación del certamen Miss Venezuela y la prostitución nos pone a reflexionar en cómo a estas jóvenes con ganas de tener una carrera televisiva les presionaban para tener un patrocinante que le financiara las operaciones ¿por qué? y ¿para qué? Si somos tan bellas no deberíamos pasar por el quirófano.

El Miss Venezuela y toda la idea social de las mujeres “más bellas del mundo” ha sido promovida en todas las maneras posibles durante los 70 años del certamen. Programas de tv, revistas, novelas, radio, periódicos, y todo el aparataje comunicacional que existe en el país se ha volcado en torno a la exaltación de este modelo de mujer y a la idealización de la misma. Por otra parte, no es casual que tanto el certamen en Venezuela y en EE.UU. tenga la misma cantidad de años de existencia. Con la explotación petrolera y la llegada de estadounidenses al país, muchas de sus costumbres se instalaron aquí y se convirtieron en parte de nuestra idiosincrasia. Por eso, desde niñas la idea de ser Miss, de ser modelos y aparecer en la tv nos coquetea a todas. Cuestión que hace mucho daño a nuestra autoestima si crecemos y no tenemos el 90-60-90 anhelado, ni la estatura requerida.

En este sentido, el cuerpo de las mujeres es visto como objeto de intercambio, deseo y pertenencia. Una vez instaladas las compañías del petróleo, muchas mujeres se vieron en la necesidad de sobrevivir y se fueron a los campos petroleros en busca de ingresos. Algunas trabajaron en las cocinas y otras se dedicaron a cubrir las “necesidades sexuales” masculinas a cambio de dinero.

Ahora bien, el recuento puede ser: dinero por sexo, comida por sexo, viviendas por sexo, zapatos por sexo, viajes por sexo… y pare usted de contar sobre lo que puede ofrecer un hombre adinerado por sexo y la compañía de una mujer joven venezolana, que no olvidemos es “la más bella del mundo”. Por lo que ser bella, joven y venezolana termina siendo un plus exótico y atractivo para muchos hombres acaudalados.

Entonces cabe preguntar, ¿es voluntaria la búsqueda de sugar? ¿las mujeres anhelan un benefactor? o ¿la situación económica que atraviesan las lleva al deseo de tener uno porque es mucho más “fácil”?

Más recientemente, se dio a conocer que un ex diputado venezolano envuelto en una trama de corrupción tenía una red de prostitución y según el portal web France 24: “…lo grave es que manejaba una red de prostitución al servicio de este grupo (de poder) donde captaban a jovencitas para que les sirvieran de damas de compañía». Mujeres jóvenes, hombres adultos y dinero del Estado de por medio para realizar las transacciones.

En 2016 salió a la luz el caso del robo millonario al ex presidente del Banco Central de Venezuela, Nelson Merentes, noticia que se leyó y escuchó en todo el país, pero que pocos pusieron la lupa donde realmente debía estar y es ¿por qué la novia de Merentes era menor de edad? Este señor es 45 años mayor que su expareja. Pocos pensamos en la relación desigual que había entre ellos, y se centró en que ella lo usó y lo manipuló para luego robarlo. Y surge la duda, de si ¿él no pudo valerse de su dinero para tener una relación con ella? y otra pregunta ¿qué hacía esa cantidad de dinero en efectivo en la casa del ex presidente del banco? Es la misma pregunta que nos hacemos con el robo multimillonario a PDVSA, pero no es el tema del que venimos hablando.

Por su parte, el Gobierno venezolano, de alguna forma, se convirtió en un sugar para muchxs durante las últimas dos décadas. Casas, carros, línea blanca y marrón para las viviendas, dólares en efectivo (cuando existía Cadivi), viajes por el mundo, becas estudiantiles, entre otras cosas, fue la manera en la que conseguía el intercambio de votos.  Ahora siguen siendo ellxs quienes ostentan el dinero y el poder, pero ya no aseguran el intercambio por votos, sino por beneficios personales donde quedan jovencitas en la línea de intercambio para su propio placer.

Políticos y militares con mansiones, infinidad de camionetas, escoltas y toda la opulencia que se nos ocurra, son una buena parte del 3.7 % de ricos que pueden darse la oportunidad de “apoyar” con estudios, comida, vivienda y otras cosas a muchachas jóvenes sin protección.

 

Una investigación de Prodavinci publicada en enero de 2022 expone que: “Según las estimaciones de ANOVA Policy Research, la brecha promedio entre 2013 y 2020 de ingresos laborales mensuales entre mujeres y hombres es de 20,4 %. Es decir, las mujeres ganan alrededor de 20 % menos en un mes que los hombres”. Eso nos pone en perspectiva con respecto a quién gana más dinero, sin importar el estrato social, y quién está en la situación de desventaja.

Las figuras conocidas por las sociedades, como el sugar daddy, han existido siempre de alguna u otra forma, pero la situación compleja en la que estamos en Venezuela coloca en la palestra de las conversaciones juveniles la alternativa de tener a un hombre que nos patrocine si somos jóvenes. Ver que no hay otra oportunidad para obtener dinero o surgir que nuestros cuerpos es parte de todo el entramado de violencias a las que estamos sometidas millones de mujeres en Venezuela por parte del Estado.

 Fuentes:

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Comadre Salomé

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