Iniciamos septiembre y para las feministas es un mes de actividades, acciones y exigencias porque el 28 se conmemora el Día internacional por la Despenalización del Aborto en América Latina y El Caribe, y en Venezuela una vez más, continuamos exigiendo el derecho a la autonomía reproductiva, a decidir cuándo tener hijas o hijos cuántos tener o no tenerlos.
Aún cuando hemos sido espectadoras de avances legislativos en la región que garantizan a las mujeres el aborto voluntario, nuestro país continúa en el más terrible retroceso. Las mujeres seguimos sorteando caminos para acceder a la interrupción voluntaria de una gestación no deseada, no planificada o producto de una violación. Pocas mujeres logran hacerlo de manera segura en clínicas privadas, pero muchas, lo hacen poniendo en riesgo su salud, sobre todo aquéllas que se encuentran en situación de pobreza, y en el medio de la desesperación, utilizan métodos cada vez más rudimentarios como soluciones vaginales jabonosas o instrumentos punzo penetrantes cuyo resultado es la muerte.
El Código Penal venezolano anacrónico y restrictivo no solo penaliza a las mujeres que lo realizan, sino también a cualquier persona que ayude y acompañe en este proceso, por ende, nos encontramos en una situación de riesgo desde todo punto de vista: ser criminalizadas por tener relaciones sexuales para sentir placer y no para la reproducción, quedar embarazadas sin desearlo, sin planificarlo o por ser víctimas de violación, tener un aborto inseguro que pone en riesgo la vida y la salud y el riesgo a ser privadas de libertad, como fue el caso de la activista Vannesa Rosales que estuvo presa por 9 meses al acompañar y orientar a una adolescente de 13 años de edad, a interrumpir una gestación producto de una violación, y que, cabe resaltar el violador sigue libre.
Recordemos que el aborto ilegal tiene dos caras: por un lado, la criminalización de las mujeres que lo realizan, y por el otro lado, las grandes ganancias económicas de las clínicas y centros de salud privados, la agudización de la mafia de medicamentos que fomenta la estafa, la especulación y la criminalidad.
Por esto y más, Las Comadres Púrpuras y el Centro de Estudios de la mujer (CEM-UCV) tomamos la palabra junto a organizaciones feministas: Ruta Verde, Juntas Nos Cuidamos, Cayapa, Pan y Rosas, Mi derecho a decidir, Mujeres, cuerpos y territorios, Uquira, Entre Nosotras.
El debate no debe descansar. Es necesario seguir informando sobre la realidad del aborto y las consecuencias que la ilegalidad trae para la vida de las mujeres y la sociedad.
La cita por Zoom. Jueves 9 de septiembre 6 pm hora Vzla.
Regístrate en este enlace: https://forms.gle/Jm4NEtfdZp6JeSpV8
Madre Si Yo Decido
Aborto Legal, Seguro y Gratuito
Educación sexual para decidir, anticonceptivos para no abortar, aborto legal y seguro para no morir.
Maternidad deseada, no obligada.