Estar juntas durante 4 días nos permitió reconocernos y aprender-nos desde nuestras experiencias diversas. Para la siembra y la cosecha todas somos necesarias, somos una.
Tuvimos la oportunidad de reír, escuchar, conversar y llorar de emoción a partir de actividades lúdicas que lograron entretejer-nos.
Este 1er Encuentro de Acción Cosecha Tejiendo Corazones, permitió pensar las acciones necesarias para crear una red de intercambio, sostenimiento, autonomía y cuidado colectivo desde la diversidad entre las organizaciones venimos articulando, tales como: la Cooperativa 8 de Marzo de Sanare, estado Lara; el colectivo El Agua nos Une de El Naranjal, estado Miranda; el proyecto de escuela de Taichi también de El Naranjal; la experiencia ecotecoturística Todasana Orgánica de La Guaira; la experiencia de acompañamiento, articulación e investigación-acción de Las Comadres Púrpuras y la experiencia en investigación de la colectiva Mujeres, cuerpos y territorios.
Esta jornada propició reflexionar sobre la dinámica interna de cada organización y su compromiso en la consolidación de este tejido. A partir de algunas preguntas generadoras, tales como:
¿Cómo nos organizamos?
¿Cómo enfrentamos las crisis y condiciones adversas?
¿Cómo ser desde la cooperación y la equidad?
¿Cómo superar el caudillismo y el individualismo?
¿Cómo construir autonomías en clave de mujeres y ecofeminista?
¿Cómo producir con conciencia ecológica?
¿Cómo crear lazos de confianza sin violencia ni discriminación, en equidad y con justicia?.
Esto permitió preparar el sendero para sembrar las ideas.
Otras actividades estuvieron dirigidas a contactar con el interior de cada una. Muy necesario en una cotidianeidad automatizada y a veces ruda. Una revisión interna que luego se colectiviza y así poder generar empatía, compañerismo, comprender las similitudes y diferencias.
A través de la actividad de dibujar en papel los pies de la compañera y viceversa, en el dibujo del pie izquierdo se tenía que responder a la pregunta:
¿De dónde vengo? y con frases y dibujos aludieron a sus orígenes familiares, ancestrales, raíces, etc. En el dibujo del pie derecho, se respondió a la pregunta ¿Hacia dónde voy? y las respuestas aludieron a sueños y anhelos en lo personal como el cerrar ciclos, viajar, ser madre, consolidar una vivienda propia. Luego, la visualización grupal de todos los dibujos permitió ahondar en el mundo interior de cada participante y se observaron deseos muy parecidos, otros, no tanto.
¡La belleza de la diferencia, de la diversidad!
También tuvimos la oportunidad de reconectar con la energía propia, equilibrar las emociones y la integración mente-cuerpo gracias a la clase de Xiomara del proyecto escuela de Tai Chi El dragón supremo Celeste de El Naranjal, una técnica poderosa de equilibrio energético y sanación, en lo individual y colectivo.
A partir de la conexión con los 4 elementos logramos concretar algunas acciones para hilar fino en organizarnos y sostenernos en el tiempo: Ser como el aire y dejarnos fluir con nuestros sueños de libertad y de justicia, y como la brisa fresca para nuevas ideas. Ser como el agua y hablarnos claro, asertivamente, ser raudal de voluntades y no agua estancada. Ser como el fuego en su justa medida que nos abriga, nos acoge y calienta, abriga nuestras familias, debemos cuidarlo para que su intensidad no queme las siembras y cosechas. Ser como la tierra que sostiene, da frutos y nos vincula y nos conecta con la vida misma.
Gracias a las mujeres y hombres de El Naranjal que brindaron su experiencia de cuidado y conservación del agua como un ser vivo más; a Xiomara por posibilitar la toma de conciencia de sí mismas, del cuidado de nuestro cuerpo como el primer territorio a atender; a la Cooperativa 8 de Marzo por compartir su experiencia de 40 años en la siembra, cosecha, constancia y autonomía; a Todasana Orgánica y la posibilidad de hacer turismo local en armonía con la naturaleza.
Nos quedamos con la certeza de haber consolidado una comunidad y con el compromiso de continuar articulando, multiplicando los aprendizajes y cultivando la confianza.
Seguimos tejiendo territorios y corazones.
Cosechamos nuestras esencias en acciones de esperanza, constancia y alegría.
Somos una y todas a la vez.
Acción Cosecha
Tejiendo Territorios
Tejiendo Corazones
Reflexión colectiva sintetizada por: Kika Martorell
Sensaciones capturadas fotográficamente por: Cacica Honta.
